28/9/09

Los once elementos del pensamiento y la actitud empresarial (I)

Inteligencia Comercial: Creación y Adquisición de Negocios

¿Qué tienen en común Bill Gates, Ted Turner, Debbie Fields, Ray Kroc, Steve Jobs y Mary Kay Asch? Todos ellos son empresarios. Todos han arriesgado capital en negocios que —al menos en su momento— eran discutibles, y tuvieron un éxito que superó ampliamente todas sus expectativas Quizá no entre en sus planes jugarse el todo por el todo con una idea revolucionaria pero sin duda querrá que su liderazgo se caracterice por el mismo espíritu empresarial y la misma energía puesta de manifiesto por esos héroes del mundo de los negocios.

1. Busque Oportunidades
Utilice sus momentos de calma mental y física para ponderar nuevas maneras de aprovechar la competencia especial o la pericia que posee su empresa y sus particulares habilidades personales Pregúntese: “¿Por qué no?” y “¿Qué pasaría si…?

2. Aprenda a ver ganancias donde otros sólo ven pérdidas
Considere cada situación adversa como una oportunidad para ganar (la realidad indica que esto es así). Cualquier modificación del statu quo, ya sea Positiva o negativa, brinda siempre la oportunidad de obtener mejores resultados Por ejemplo, perder a su más valioso asistente le podría dar la oportunidad de reorganizar a fondo su equipo de trabajo.

3. Considere los fracasos como un aprendizaje
Los grandes pensadores consideran que los fracasos son lecciones que deben celebrarse y no errores que hay que llorar, Debbie Fields, de Mrs. Field’s Cookies dice que las dos lecciones más importantes que ha aprendido en su vida empresarial son: nunca abandonar y nunca repetir un mismo error.

4. Supere sus errores
Un verdadero empresario sufre el dolor de sus errores sólo una vez. Reconoce que un criterio equivoca es una oportunidad de aprendizaje no una situación que se sufre. No tiene tiempo para preocuparse por el ayer. Nunca considera que un error es algo inherente a su Personalidad sino algo relacionado con su desempeño en una situación particular, bajo determinadas circunstancias Se obliga a que, la próxima vez, cambiará su desempeño, la situación o las circunstancias.

EN CIERTA OPORTUNIDAD, UN CEO TUVO LA IDEA DE CREAR EQUIPOS QUE OPERARAN BAJO EL SISTEMA DF AUTOGESTIÓN. LA APLICACIÓN DE ESTA IDEA FUE UN FRACASO TOTAL. SUS EMPLEADOS SE RESISTIERON AL PROYECTO DESDE EL PRIMER MOMENTO, Y ÉL COMPROBO QUE PREMISAS EN QUE HABÍA BASADO LA INICIATIVA ERAN TOTALMENTE ERRÓNEAS. EN UNA CHARLA POSTERIOR CON UN COLEGA, SURGIÓ EL TEMA DE LOS GRUPOS DE AUTOGESTIÓN. EL COLEGA OBSERVÓ: “ASÍ QUE LA IDEA DE LA AUTOGESTIÓN FRACASÓ EN SU EMPRESA…”.
LA RFSPUESTA DEL CEO FUE:
“NO, NO FRACASAMOS CON LA AUTOGESTIÓN. APRENDIMOS LA FORMA EN QUE NO DEBE SER IMPLEMENTADA”.


5. Mantenga la mente abierta
Nunca se sabe de dónde puede surgir la próxima idea que de origen a un nuevo emprendimiento. A no ser que mantenga abiertos los ojos, los oídos y su mente, corre peligro ele no ver, oír o darse cuenta de que la oportunidad está llamando a su puerta. La próxima vez que esté por decir: “Esto ya lo hemos intentado antes” o “Esto no va a funcionar", muérdase la lengua. Diga, en cambio: “Cuénteme más sobre su idea”, o: “Pruebe esa idea por un tiempo y manténgame informado”.

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